La Clase Essex era una clase de portaaviones de la Armada de los Estados Unidos que constituía la clase más numerosa de buques de guerra del siglo XX.
La clase constaba de 24 embarcaciones, que venían en versiones de "casco corto" y "casco largo".
Inicialmente se ordenaron 32 barcos, pero a medida que la Segunda Guerra Mundial se desplomaba, seis fueron cancelados antes de la construcción, y dos fueron cancelados después de que la construcción había comenzado.
Ninguna nave de la Clase Essex se perdió por acción enemiga, a pesar de que varias naves sufrieron daños muy graves.
Los portaaviones de Clase Essex fueron la columna vertebral de la fuerza de combate de la Armada de Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial a partir de mediados de 1943 y, junto con la adición de los tres portaaviones de clase Midway inmediatamente después de la guerra, continuaron siendo el corazón de la fuerza naval de Estados Unidos hasta que los superaviones comenzaron a entrar en la flota en números durante las décadas de 1960 y 1970.
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